miércoles, 3 de septiembre de 2014

Ian Mcewan: Amor perdurable.

Mi primera lectura de este autor inglés me ha sorprendido de principio a fin. Amor perdurable traza la historia de una pareja que tras la experiencia de un accidente que termina en una tragedia traumática, la muerte de un hombre al caer de un globo aerostático en el intento altruista de salvar a un niño que iba dentro, queda trastornada, afectada en su intimidad. Mejor dicho, es la estabilidad del hombre, Joe, la que queda en entredicho, como si el accidente hubiera desencadenado en él una fisura por la que brotaran todos sus desajustes y problemas mucho tiempo ocultados y reprimidos. Jed, un chico que intentó ayudar en el accidente junto con Joe, queda prendado de él, y presa de un arrebato de amor intentará guiarle por el camino de la verdad, el de Dios, en el que al fin, podrá reconciliarse consigo mismo. Jed argumenta en sus llamadas telefónicas, en sus reiteradas cartas y encuentros furtivos que Joe ha sido el que ha empezado todo esto, que él le hace señales que confirman su amor, que debería aceptarlo y dar el paso de abandonar su antigua y falsa vida.

Puesto que el narrador de la novela es el mismo Joe, asistimos a un constante monólogo obsesivo que pretende justificar su inocencia, su posición de víctima ante la situación, así nos muestra la paranoia que le produce su perseguidor. Varias veces se apunta (mediante la voz de Clarissa, su novia, o algunos inspectores y policías) la posibilidad de que Jed sea una invención o proyección del protagonista, puesto que nadie le ha visto esperando en la acera de enfrente como Joe afirma, la letra de las cartas es sospechosamente parecida a la suya propia, etc. A lo largo de la novela, el círculo que teje el maníaco acosador se va estrechando alrededor de Joe, volviéndose cada vez más delirante y asfixiante.

La narración de Joe produce un efecto de desconfianza en el lector, puesto que aunque intente convencernos de su inocencia, la atención que dedica a la persecución de la que es víctima se delata entre sus reflexiones de científico, entre sus rutinas domésticas, sus justificaciones, sus reflejos en los lugares públicos, como las ojeadas a su alrededor, etc. Con ello vemos cómo se dibuja la espiral obsesiva sobre el protagonista sin tener nunca la certeza de lo que ocurre.

Evidentemente, tras el accidente y la paranoia persecutoria que sufre Joe, la pareja que antes vivía sin perturbaciones en una armonía bucólica, se va desintegrando poco a poco, se van distanciando y perdiendo la confianza que les unía. Las discusiones enérgicas y agresivas, los gestos llenos de reproches y las estrategias acampan a lo largo de la novela, confiriendo al relato un ambiente cargado y agobiante muy logrado, que recuerda a las escenas de amor de Godard, en las que una charla sincera liberaría la situación de cargas y tensiones.

Evidentemente, recomiendo Amor perdurable. Lo leí estando enferma, y en un día ya lo había devorado. Una lectura que os arrastrará por la mente del protagonista, lleno de locura infundada o real.

Editorial Anagrama, 9,90e

2 comentarios:

  1. No he llegit aquest de McEwan i quan em parlaves d'ell, no sabia bé de qué anava, però ara m'ha cridat bastant l'atenció. No em recorda tant a les altres noveles excepte tot el tema del distanciament de la parella que també està molt a Chesil Beach i potser una mica a Expiación (pero no tant present). M'ha recordat la trama una mica a Dr. Jekyll y Mr. Hyde, pero igualment es un dels que tinc pendent i a veure si el trobo a la re-read o algo i me'l compro *-*

    P.D: Anava a fer el comentari en castellà... però se'm fa massa raro xDD.
    ¡Un petó!

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    1. Isa! em fa molta il·lusió que siguis tu la primera a comentar! qui anava a ser sinó!
      Doncs, per l'humor cínic i l'ironia respecte el protagonista, em va agradar molt més que Chesil Beach! i molt encertat lo de Dr. Jekyll y Mr. Hyde!
      petons guapa!

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